Los fantasmas son espíritus torturados que se retuercen en la agonía de los no-muertos. No son conscientes de que ya no están vivos y vagan por las infinitas extensiones del Vacío Abisal y del mundo físico en busca de la liberación de su sufrimiento eterno. Aunque no son necesariamente malvados, a menudo su hambre de contacto físico causa un gran daño a los seres vivos a los que tocan.[1]
En el universo Warcraft, el término "fantasma" hace alusión a cualquier ser no-muerto incorpóreo.
Trasfondo
Los fantasmas son remanentes espectrales de seres inteligentes que por alguna razón, no pueden descansar en sus tumbas. Un fantasma se asemeja en gran medida a su forma corpórea en vida, pero con la forma espiritual alterada en muchos casos.[2]
Son impresiones espectrales de individuos que fallecieron debido a la peste o algún incidente increíblemente traumático. A menudo, los que han contraído la peste intentaron acabar con sus vidas en vez de unirse a los ejércitos de Ner'zhul; sin embargo, este intento a menudo frustrante normalmente resulta en la creación de un espíritu independiente de la influencia de Ner'zhul, pero no muerto por completo.
Referencias
- ↑ Manual de Warcraft III, 74
- ↑ Monster Guide, 74