El Templo de Niuzao abarca dos islas fortificadas al otro lado de la gran muralla conocida como Espinazo del Dragón. Durante años, los tenaces defensores pandaren han defendido los estrechos puentes que conectan las islas de todo posible invasor. Sin embargo, hace poco los mántides han creado su propio puente, una gran raíz de árbol, y se han hecho con una de las islas por sorpresa. Ahora estos brutales insectoides se preparan para atacar a los guardianes que le quedan a Niuzao [1].
Geografía[ | ]
Misiones[ | ]
Por confirmar.
Habitantes de la mazmorra[ | ]
Por confirmar.
Jefes[ | ]
Vizier Jin'bak
El visir Jin'bak deambula por el extremo del puente natural de los mántides, recolectando la valiosa savia de las raíces del árbol. Gracias a sus extensos conocimientos alquímicos, este ser formidable transforma dicha sustancia en armas y demás herramientas que agilizarán el asedio del Templo de Niuzao.
Commander Vo'jak
Lo que al comandante Vo'jak le falta en pericia estratégica, lo compensa con ferocidad bruta. Sus golpes devastadores fueron cruciales para la colocación del puente mántide que les permitió adentrarse en la isla. Elaborar planes de batalla es para el general de los mántides; Vo'jak solo ansía sangre.
General Pa'valak
El pragmático general Pa'valak no teme a los pandaren ni a sus aliados, y no distingue entre utilizar su propia fuerza y la de su ejército mántide para derrotar a sus enemigos. La victoria es todo el honor que desea, y no tolerará el fracaso si sus esbirros no cumplen sus objetivos.
Wing Leader Ner'onok
Los golpes decisivos del líder de escuadrón Ner'onok le han ganado cien batallas. Las pequeñas victorias del general Pa'valak no son nada en comparación con la que Ner'onok cree que podría conseguir de estar al mando. Aunque sus ataques aéreos ya han devastado a los guardianes del templo, este terror alado aún busca la oportunidad de demostrar que es superior al general.